Curvas contrapuestas

Mi padre decía: a mí me gustan las personas rectas.

A mí me gustan las personas curvas, las ideas curvas, los caminos curvos, porque el mundo es curvo y la tierra es curva, el movimiento es curvo.
Me gustan las curvas, los pechos curvos, y los culos curvos.
Los sentimientos son curvos, la ebriedad es curva, las palabras son curvas, el amor es curvo, lo diverso es curvo. Hasta ¡el vientre es curvo!.

¡Contemplar es curvo!; puedes contemplar las curvas y conocer la tierra

Me gustan los mundos curvos; la risa es curva, la alegría es curva, el dolor es curvo;

las uvas: curvas; las naranjas: curvas;
los labios: curvos; y los sueños; curvos;
los paraísos, curvos: "no hay otros paraísos";

El día es curvo y la noche es curva;
Vivir es curvo, la poesía es curva, el corazón es curvo.
¡la aventura es curva!.

Si una línea recta es el camino más corto entre dos puntos, la curva es lo que me hace buscar lo infinito.
No es el ángulo recto el que me atrae, ni la línea recta, dura, inflexible, creada por el hombre, me atrae la curva libre, la curva que encuentro en las montañas, en las olas del mar, en el curso sinuoso de los ríos, en las nubes, en el cuerpo de la mujer.......

Y a ti..........., ¿qué te gusta?.

La curva que forma esa masa de nubes tan compacta está contrapuesta con la que forma la carretera y la que dibujan las luces de los coches.